Una manera sencilla de bajar o mantener el peso es mediante el control de las porciones. Una porción es la cantidad de alimento que se consume, y mientras más grande son nuestras porciones, más calorías estamos ingiriendo. Existe una forma muy sencilla de conocer la porción correcta sin necesidad de memorizar una gran lista de alimentos con su porción recomendada, ni contar con tazas de medir todo el tiempo. En su lugar, utilizamos las manos para reconocer y recordar el tamaño apropiado de nuestras porciones. Aquí te enseñamos como:
- Proteínas: La porción es del tamaño de la palma de la mano.
- Grasas: La porción no debe ser mayor que la punta de un dedo.
- Vegetales: Una porción es equivalente a 2 manos juntas.
- Carbohidratos: Las porciones deben de ser del tamaño del puño.
Además del control de las porciones, existen otras recomendaciones que nos pueden ayudar a tomar las decisiones correctas para mantener una buena alimentación. Como son:
- No llegues a las siguientes comidas (almuerzo o cena) con mucha hambre, cuando saltamos una comida o no realizamos meriendas puede provocar llegar con mayor apetito a la siguiente comida y comer sin control. Lo recomendable es consumir un refrigerio saludable rico en fibra, como un pedazo de fruta o un puñito de frutos secos.
- Come despacio, esto es importante, ya que le permite al estómago asimilar y reconocer cuando está lleno.
- Aprende a distribuir tus porciones. Divide el plato en 4 secciones iguales, llena dos secciones con vegetales, una con cereales o víveres y la última con proteínas.
- Usa platos pequeños y sírvete porciones pequeñas. Recuerda que no existen comidas buenas o mala, solo debemos aprender a comer con moderación.
Poder identificar un plato con las porciones adecuadas con cada tipo de alimento es cuestión de práctica, pero al controlar las porciones también controlamos las calorías que consumimos, lo cual es un punto a favor al momento de lograr el bienestar.
Escrito por: Mariel German Especialista en Nutrición